El Tiempo

Nosotros:

El tiempo es el producto del movimiento de un planeta sobre si mismo y alrededor de una estrella. La tierra, al poseer rotación sobre su eje polar, tiene el día y la noche y al trasladarse alrededor del Sol, el año de 365 días y seis horas. En la franja de la tercera dimensión el tiempo posee pulsación y por eso el segundo, el minuto, la hora y el pulso del corazón en nuestro cuerpo. Existen planetas más grandes que otros y por tal, rotaciones y traslados diferentes que producen tiempos menos o más extensos que el terrestre y seres de diferente estructura molecular y celular

Nuestro tiempo, al ser de pulsación y estar en la tercera dimensión, determina la forma de cubo donde existe un ancho, un alto y un largo. Por eso las casas, habitaciones y otras muchas cosas que utilizamos, poseen ángulos. Por eso nuestra matemática finita, nuestro ser egoísta, del que tenemos que liberarnos. Por ello la dependencia, la competencia, la batalla, el dinero, el poder y la diferencia de status entre unos y otros.

Cuando el ser de la Tierra enciende su esencia y entra en los primeros albores de la consciencia, encuentra la derivación del tiempo en el cubo, a través de algo que llamaremos, “la diagonal”. Una línea temporal que hace el escape del yo menor al yo superior, del yo egoísta al yo inteligente, del yo perdedor al yo ganador, del yo frágil al yo seguro, del yo enfermo al yo sano, del yo ansioso al yo seguro, del yo peleador al yo armonioso, del yo instintivo al yo intuitivo y así en muchos de los diferentes aspectos de la vida humana..

Más allá de nosotros, existen tiempos de onda, tono y luz, de acuerdo a la dimensión o franja de tiempo donde este situado el mundo y los seres que viven en él y por lo tanto, inteligencias mayores y grandes consciencias.

Desde el 21 de diciembre del año 2012, nuestro mundo esta entrando en un ascenso en la diagonal del cubo de los tiempos de la tercera dimensión y nos lleva, muy directo, a una nueva historia. El año 2017 será fuerte porque es el último de cinco años de un proceso de cambios y grandes purificaciones que romperán los viejos esquemas, y debemos crecer en nuestro pensamiento armonioso para saltarlo con paciencia, comprensión y mucho entendimiento

El primero de enero del año 2018, esa diagonal nos mostrará una nueva visión de la vida. Las formas angulosas, que han estado perdiendo protagonismo, cambiaran por las formas ovaladas y luego esféricas. La mente humana se acercará a la frontera de la cuarta dimensión, que se sitúa al final de la diagonal del cubo é irá perdiendo su pensamiento egoísta donde existen las pulsaciones antes descritas, para conectarse con el cosmos, con familias y culturas de otros planetas y con nuevas creaciones que traerá a la Tierra, llamada hoy, GAÍA.

 

                                                                        El Tiempo Comprimido


 

El Tiempo, ese maravilloso estado que nos lleva a disfrutar la vida, creciendo en ella, proyectando ideales, amores, felicidades, éxitos y realizaciones. El tiempo, ese fabuloso ingrediente que esta en todas las medidas de la vida y en todas las dimensiones del Universo, que interconecta todo lo que es, influye en todas las mentes que existen y se alimenta de todos los espacios creados. El Tiempo, ese maravilloso ingrediente que segundo a segundo esta a nuestra disposición para ayudarnos a tener orden en nuestros pensamientos y nuestros actos, en la salud, la prosperidad y la comodidad mientras lo vivimos.

El Tiempo, esa infinita escalera al Universo, compuesta por interminables escalones tejidos por tiempos de tiempos. El Tiempo, el testigo número uno de la obra creadora de las galaxias, nebulosas, estrellas, planetas, astros, civilizaciones y todo lo que vive en todos los rincones de todos los espacios.

Pero, en nuestro mundo, los rectores de la sociedad humana nos han enseñado que debemos vivir el Tiempo, llenos de necesidades, sufrimientos, pobreza, dolor, pena, culpa y pecado. Factores que lo comprimen con un resultado no muy bueno, pues el tiempo comprimido, deprime el  pensamiento, no permite los buenos actos, eleva los niveles eléctricos del cuerpo, crea los estados nerviosos, la inseguridad, la duda, la histeria, la mentira, el estrés y por consiguiente, le da a las leyes, colores grises y oscuros.

El tiempo comprimido obstruye la información del conocimiento, pasa muy rápido, nos vuelve viejos, nos deja en la historia, en la esperanza, la fantasía, la ilusión y la enfermedad. Nos hace errar, nos deja sin punto fijo y en las manos de los dirigentes de una colectividad que nos transforma en su colección de esclavos.

Que importante que le des al tiempo la libertad de vivir en ti plácidamente, liberándote, a la misma vez, de los condicionamientos del miedo, para que seas tan ágil como él, descubras las bellezas que están guardadas en sus urnas y abarques la grandeza en todos los sentidos.

La Tierra de Gaía con su raza, esta llegando lentamente a la frontera de la cuarta dimensión. El hombre físico no va a entrar en ella, pero si su mente y para que esto suceda, debemos estar muy limpios en nuestras leyes y muy pulcros en el pensamiento, no solo para que atraigamos ideas de otros tiempos, sino para que tengamos la línea de la intuición de nuestra parte y así nuestra historia del pasado se convierta en la historia del futuro. 

Prepárate; muy pronto tu ser empezará, muy naturalmente y a través del sueño y el pensamiento, a realizar visitas al futuro y al pasado y a recibir visitantes que llegaran de otros tiempos.

Mírate y siéntete como el árbol mas grande del jardín de los amores y la flor más hermosa llena de múltiples colores, fabulosos aromas y los más abundantes tiempos.

Todo esto te hará el mejor de los mejores…el Gran As de la Vida.

Raúl Yepes