Acar el Arturiano

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Acar vive en el planeta Etha de la estrella Arturo. Estrella 18 veces más grande que el Sol, ubicada a 37 años luz de nosotros y acompañada de otros 53 soles que constituyen La constelación del Boyero. El señor Acar con los suyos, conforma la raza de los Arturianos.

Acar ha sido designado, por la Raza de los Mayores, para ayudar a los humanos en su cambio mental, de la tercera a la cuarta dimensión. Desde hace años, esta al mando de la Nave Thea, situada en tercera dimensión por encima de nuestra estratosfera desde hace 13.000 años. Allí se monitorea la evolución de toda nuestra civilización, además de las diferentes acciones de los rectores de nuestro mundo, influyendo en algunos de ellos si son para el bienestar humano y obstaculizando algunos que no son buenos. Los dos últimos misiles fallidos de Corea del Norte son muestra de ello. Esto ocurre desde la Nave Thea, llamada por las potencias de la Tierra, “El Caballero Negro”.

La administración Obama por pedido de los Bilderberg, quisieron atacar con un misil a la nave Etha, pero desde allí salió una advertencia muy fuerte y con ello el ataque tuvo que abortarse. Vladimir Putin también intercedió para que no se diera.

Acar, a la misma vez, es el director de una nave hospital llamada Athena, muy paralela a la nave Thea pero en quinta dimensión. En sus salones internos se realizan tratamientos médicos y desde su laboratorio central se efectúan ayudas de alivio y sanación holográfica a muchas personas de la Tierra en sus casas y hospitales.

Dice Acar: “Venimos de la quinta dimensión para asistir a los seres de la Tierra en su transición. Nuestra ascensión fue hace mucho tiempo atrás. Un estado que muchos humanos admiran y quisieran participar. Vengo en la ayuda de sobrepasar los instintos básicos primitivos y moverlos a una frecuencia más elevada que les permita sentir y vivir en sus cuerpos de luz”.

Los Arturianos aunque viven en el quinto tiempo, pueden estar en cuarta y tercera dimensiones. Miden entre uno y dos metros de estatura, son de ojos grandes almendrados y de color marrón. Su piel fluctúa entre el color blanco resplandeciente y el verde. Poseen tres dedos. Su alimentación es a base de un liquido efervescente que vitaliza su ser por mucho tiempo. Viven entre 300 y 400 años. Pertenecen a La Hermandad del Todo. Son muy amorosos y viven para enseñar, purificar y llenar de luz a los seres de dimensiones inferiores, como nosotros los Humanos. Absorben información a través de su sistema nervioso y tienen bases en nuestro planeta.

Acar, un señor para nuestros dias.

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